El 12 de noviembre se inauguró en Bogotá la Feria del Hogar 2020.

Una feria del mueble para el consumidor final.
Por tanto, no es una feria puramente especializada.
Alojado en Corferias Bogotá.
Un elegante centro de exposiciones, que en términos de tamaño y estilo parece destinado al uso del consumidor final.

Lo primero que me hace realmente feliz, es el hecho de que por fin hay una feria del mueble donde es posible visitar los pabellones.

Para hacer esto posible, se implementaron todas las precauciones posibles.
Dentro de la feria, de hecho, hay innumerables estaciones para lavarse y desinfectarse las manos.
Para acceder a la feria, también hay control de temperatura corporal.
Así como un sistema inteligente de compra de entradas a través de la web.
La Corferias, organismo organizador de la feria, ha decidido reducir la presencia de público visitante a un tercio.
Esto también es una manifestación de atención a la salud de los visitantes.

Hacía un par de años que no venía a esta feria dedicada al mueble.

Pero tengo la sensación de que la presencia de sectores no relacionados con el mueble, ha aumentado proporcionalmente.
Esta puede ser una elección estratégica.
Pero seguramente la pandemia ha creado problemas económicos que también Bogotá está sufriendo.
Lo que realmente me sorprendió, sin embargo, es el hecho de que no hay una presencia digital adecuada del evento de la feria en el sitio web de Corferias www.feriadelhogar.com, como hubiera esperado.
Así como me sorprendió el hecho de que en las redes sociales creadas por el organismo organizador de la feria, no exista una página de Pinterest.
Porque creo que Pinterest es una página fundamental en el campo de la imagen.

El ejemplo de las chicas de decoclam.

Al igual que Tik tok no se tuvo en cuenta.
Hoy se ha convertido en un medio de comunicación muy poderoso.
También en el sector del mueble, como están demostrando al mundo jóvenes interioristas de Colombia.
Abordaré este tema nuevamente, creo que soy el blogger de muebles más antiguo del mundo.
Inicié con mi primera feria del mueble en Milán desde casi medio siglo y a trabajar en marketing digital en 1994.
Pero me sigue sorprendiendo mucho, cómo el mundo del mueble no se está adaptando al marketing digital.